viernes, 25 de julio de 2008

Endemismos

Coirón (Stipa humilis, Stipa speciosa, Festuca pallescens)
Colapiche (Nassauvia glomerulosa)
Espino negroMata negra (Verbena tridens, Chiliotrichum diffusum)
Murtilla (Empetrum gracillima)
Neneo (Mulimum spinosum)
Picaflor Rubí
Este picaflor no emigra a zonas cálidas en invierno. Es muy curioso y bastante confiado cuando se acostumbra a las personas, que en invierno suelen colgar recipientes con agua azucarada o con miel para alimentarlos. Su cuerpo es verde tornasolado, alas negro-azuladas, vientre gris claro y garganta punteada de verde. Su característica sobresaliente es la corona rojo anaranjada, que en la sombra sólo parece negra. Tiene además una notoria manchita blanca detrás de los ojos.

Bandurria Baya
Cabeza y nuca marrón rojizo, dorso grisáceo, cola y borde de alas negras. Cuello y pecho amarillentos, vientre negro y patas rojas. Largo pico negro y curvado, con el que busca su alimento bajo tierra. Esta hermosa ave regresa en primavera, reuniéndose en ruidosos grupos sobre praderas abiertas, pudiéndoselo ver también cerca de lagos y cursos de agua. En vuelo se comunican con un constante llamado metálico, como trompeteo.
Flamenco Austral
Es posiblemente el más hermosos de las tres especies de flamencos que habitan en nuestro país y tiene su hábitat en lagunas y corrientes de agua dulce y salobre. El cuerpo es rosado, alas de color salmón fuerte, bordeadas de negro. Desata toda su belleza en vuelo. El pico es grueso, negro y curvado para peinar el fondo barroso. Se lo ve generalmente en bandadas bastante populosas.

Teru Teru

Se lo encuentra en toda la República en praderas, en zonas campestres y acuáticas. El dorso es pardo, las alas brillan en un tono verdoso tornasolado y rojizo en los hombros. Frente, garganta y pechos negros, vientre blanco y ancha faja negra en la cola. El pico es rojo con punta negra, ojos color rojo. El macho que vemos en esta foto tiene además espolones rojos en los hombros. Es bastante agresivo, especialmente en época de cría. Su insistente grito "teru-teru" alerta ante cualquier peligro o anormalidad. Por eso es común que se lo mantenga como guardián en propi.


Guanaco
Los Guanacos forman parte de la fauna autóctona de la región, junto con Choiques, Maras, Piches y Zorros. Es frecuente verlos al transitar rutas o caminos. De ojos grandes y largas pestañas , con pelo largo y espeso. Podemos acercarnos pero frente al peligro huyen , saltando cuanto arbusto o alambrado encuentran a su paso.


Liebre o Mara
Esta es la especie de mayor tamaño llegando a superar en medida a la liebre europea. En su pelaje es dominante el gris, volviéndose blanco en las partes inferiores. Es roedor muy común en los zoológicos en donde anda suelta. Probablemente su carne es comestible y su piel es muy apreciada.

Una Breve Introducción...

Estepa Patagónica

La Estepa Patagónica se extiende desde la Cordillera de los Andes hasta el Océano Atlántico, en el tercio sur del país. Este extensa región se presenta como una sucesión de mesetas y terrazas planas o suavemente onduladas, cubiertas por arbustos bajos y gramíneas. La vegetación presenta adaptaciones para sobrevivir con fuertes vientos y déficit hídrico prolongado. Los pastos como el coirón suelen crecer en matas bajas, y tienen hojas duras y compactas. La defensas contra los herbívoros incluyen la presencia de espinas, resinas y esencias, que las tornan desagradables como alimento. Como esta región es tan extensa, abarcando unos 750.000 km. cuadrados, la composición de la estepa arbustiva varía. En la provincia de Chubut predomina una vegetación muy rala y baja, que deja la descubierto un sesenta y cinco por ciento del suelo; más hacia el sur, en la provincia de Santa Cruz, aparece una estepa abierta en donde el quilembai es reemplazado por al mata negra, un arbusto de follaje oscuro de más de medio metro de alto. En la zona de la Cordillera y a medida que se gana altura, la estepa arbustiva desaparece dando paso a extensos pastizales de coirón blanco. Los ambientes acuáticos de la estepa concentran una intensa biodiversidad. Las vegas o mallines se caracterizan por la presencia permanente de agua, que permite el desarrollo de una densa alfombra verde de junquillos y otras hierbas tiernas de menor tamaño. Tienen su fauna particular, destacándose aves como las agachonas y la becasina. En esta área se encuentra el Parque Nacional Laguna Blanca (en Neuquén, región patagónica andina), y el Monumento Natural Bosques Petrificados (en Santa Cruz, región patagónica atlántica).


http://www.argentinaturistica.com/rpatagoniaandnaturaleza.htm

viernes, 18 de julio de 2008

Vegetacion

Principales unidades de vegetación de la Patagonia

La vegetación patagónica presenta una gran heterogeneidad tanto fisonómica como florística. Esta heterogeneidad contradice, en buena medida, la percepción de esta región como un vasto desierto en el fin del mundo. La Patagonia alberga desde semidesiertos a praderas húmedas con una gran variedad de estepas arbustivas y graminosas entre medio. Esta heterogeneidad en la vegetación refleja las restricciones que imponen las características climáticas y edáficas. Si bien las observaciones de la vegetación y la fauna patagónica comenzaron en el siglo XVIII, las primeras descripciones datan de principios del siglo pasado (Hauman, 1920, 1926; Frenguelli, 1941). La Provincia Fitogeográfica Patagónica es la prolongación austral del dominio florístico andino (Cabrera, 1976). La Patagonia se diferencia de las otras provincias de ese dominio (la Puneña y la Altoandina) por la presencia de endemismos de géneros tales como Pantacantha, Benthamiella, Duseniella, Neobaclea, Saccaedophyton, Ameghinoa, Xerodraba, Lepidophyllum, Philipiella, Eriachaenieum (Cabrera, 1947). Soriano (1956 a) describe por primera vez de manera comprehensiva e integral la heterogeneidad de la región, y da fin a una serie de controversias derivadas de una exploración incompleta y asistemática de la región. En su trabajo identifica seis distritos sobre la base de características fisonómico- florísticas: el Subandino, el Occidental, el Central, el de la Payunia, el del Golfo de San Jorge y el Magallánico. Más recientemente, otros autores (León et al., 1998) avanzan sobre la descripción de Soriano y sintetizan los trabajos florísticos, fito-sociológicos y ecológicos generados a partir de 1970 por distintas instituciones y revisan los límites entre los distritos.












Esta subregión guarda un gran interés botánico, dado que da cabida a una serie de endemismos estrictos y especies susceptibles de ser catalogadas en distintas categorías de rareza (rareza biogeográfica, de hábitat y demográfica) (Halffter y Ezcurra, 1992). El hábitat de alguna de estas especies es sumamente frágil y además se tiene constancia de que está extremadamente amenazado por factores antrópicos tales como la construcción de cuadrículas por parte de empresas petroleras, presencia de presas y embalses y, en todo el área, el sobrepastoreo por cabras. Estos factores son de nuevo cuño, de manera que la flora no ha tenido tiempo en términos evolutivos de enfrentarse a ellos. Prospecciones preliminares llevadas por nuestro equipo en el territorio habían permitido constatar que el área constituye un sector biogeográfico que presenta una importante riqueza florística con elementos propios como Adesmia glandulifolia Steibel & Ulibarri, Sporobolus mendocinus E. Méndez, Lithodraba mendocinensis (Hauman) Boelcke o Senna nudicaulis (Burk.) H. S. Irwing & Barneby, a los que se suman elementos florísticos aportados por las regiones adyacentes.














Esta comarca constituye un sitio ideal para llevar adelante desarrollos metodológicos que permitan establecer estimadores de biodiversidad de territorios no explorados y el estudio de los tipos biológicos presentes, de los que resultará la información para la ulterior aplicación de planes y necesidades de conservación. No podemos pensar en establecer una estrategia de conservación de la biodiversidad en Argentina o en otros países del continente sin disponer de este tipo de información básica. A partir del año 1994 se publicaron una serie de catálogos de la flora vascular de la República Argentina (Zuloaga et al., 1994, Zuloaga y Morrone, 1996; 1999). Estos trabajos contaron con la colaboración de más de 70 investigadores de Argentina y otros países, y pueden considerarse como punto de partida para el conocimiento de la biodiversidad de este territorio. Sobre esta base bibliográfica podemos corroborar nuestra percepción de que en el área que nos ocupa la prospección florística está muy lejos de ser exhaustiva, ya que encontramos numerosas especies no citadas previamente para esta región. En ciertos casos, nuestras colecciones sirvieron para ampliar el área de distribución de varios taxones. El conocimiento de muchas de estas especies se manifiesta aún más precario, si se tiene en cuenta que gran parte de ellas son poco o nada conocidas (de algunas sólo se conoce el ejemplar tipo y de otras apenas unos pocos pliegos de herbario). Además en los viajes realizados durante este último año (a lo largo de la última década los autores han participado en unos 10 viajes al área en cuestión) se coleccionaron un total de 2.486 ejemplares pertenecientes a 75 familias, 302 géneros y 612 taxones específicos y subespecíficos (Tabla 1).
Tabla 1.- Resumen de las familias en las cuales se han encontrado mayor número de endemismos, discriminados en los que se encuentran ampliamente distribuidos en Argentina y aquellos exclusivos del área en estudio. *NTEA es el número total de endemismos de esa familia en Argentina. **NEAA es el número de endemismos de esa familia de distribución amplia en Argentina y coleccionados en el área de estudio. ***NEEA es el número de endemismos de esa familia exclusivos del área de estudio.





El área tratada, de unos 90.750 km2, corresponde al 3,25% del área continental de Argentina. Como resultado de estudios realizados de prospección se encontraron en ella 159 taxones endémicos de Argentina, que representan un 8,34% del total. Asimismo, 80 de esos taxones son endemismos exclusivos del área tratada (el 4,20% de los hallados). Existe un elemento florístico extremadamente original en la zona: las especies andinas, que aparecen también en la vertiente pacífica (Tabla 2). Los taxones involucrados, si bien no son endémicos de Argentina, se distribuyen en el ambiente cordillerano exclusivamente, en tanto para otras especies la Cordillera de los Andes constituye una barrera. Se destaca la presencia de numerosas especies de los géneros Baccharis, Senecio (Asteraceae), Azorella y Mulinum (Apiaceae), Acaena (Rosaceae), y de las familias Ephedraceae y Calyceraceae que se distribuyen en ambas vertientes.
Tabla 2.- Resumen de la presencia de especies andinas que se distribuyen también en la vertiente pacífica.




Por otra parte, estudios realizados en esta área de distribución de 69 taxones (Tabla 3), como por ejemplo Senna nudicaulis (Burkart) H.S. Irwin & Barneby, que permitió completar la diagnosis original mediante la descripción del fruto y semillas (Troiani & Steibel, 2001), y Astragalus mendocinus Gómez-Sosa cuya localidad típica se encuentra dentro del área relevada en este trabajo y del cual sólo se conocía el holotipo (Gómez-Sosa, 1988).

Tabla 3.- Número de especies por familia para las cuales se ha ampliado el área de distribución conocida.

Otro factor que se tiene en cuenta fue el análisis de los tipos biológicos existentes. Por tratarse de una región muy amplia con variados ambientes, el sector tratado es muy rico en diversidad de formas biológicas. Como en la mayoría de las zonas áridas son muy abundantes los terófitos de vida efímera. De todos modos, los caméfitos son sin duda las formas biológicas más numerosas y entre ellos llaman particularmente la atención por su diversidad y representatividad en diferentes familias botánicas los caméfitos pulvinados o plantas en cojín.


http://www.revistaecosistemas.net/articulo.asp?Id=255

viernes, 11 de julio de 2008

Tipos de suelo



Mapa de los diferentes tipos de suelos de la República Argentina:










Aridisoles - Suelos que absorben rápidamente el agua de lluvia o de deshielo. Son pocos fértiles por contener escasa materia orgánica . Resultan fácilmente erosionables.(Suelo correspondiente a la estepa patagónica)




Alfisoles - Suelos arcillosos, con escasa materia orgánica. Sobre ellos se forman bañados y pantanos. Son poco productivos y se los usa como campos de pastoreo.




Oxisoles - Suelos rojos, producto de la oxigenación de rocas volcánicas con alto porcentaje de hierro. Las abundantes lluvias los erosionan fácilmente y son de mediana fertilidad.




Entisoles - Suelos con frecuentes procesos de salinización y baja fertilidad, por carecer de materia orgánica. Son mejorados en los oasis de cultivos creados por el hombre.




Vertisoles - Poseen alto contenido de arcilla. Debido a los sucesivos períodos húmedos y secos presentan resquebrajamiento y agrietamiento. Son difíciles de utilizar en la agricultura.




Inceptisoles - Se encuentran por lo general en valles húmedos, tanto en zonas frías como cálidas. Ricos en nutrientes y materia orgánica. Se destaca la vegetación arbórea.




Molisoles - Suelos oscuros, sueltos y con alto porcentaje de materia orgánica. Son los más fértiles del país, aptos para la actividad agraria, ganadera y forestal.




Histosoles - Se encuentran en áreas pantanosas y corresponden a los suelos de turberas, mallines y esteros. Son ricos en materia orgánica en lento proceso de descomposición.




Estepa Patagonica - Meseta Central de Río Negro










Esta foto corresponde a la meseta central de Río Negro, donde se aprecia claramente la aridez que presentan los suelos de la Estepa Patagónica. Las precipitaciones son menores a los 200 mm anuales y la temperatura media va de 10 a 12 C°. Predominan las peneplanicies, las sierras bajas y los sectores más bajos de las mesetas basálticas. La vegetación se caracteriza por estepas arbustivas bajas (con Nassauvia glomerulosa "colapiche", N. axillaris "uña de gato" y Chuquiraga avellanedae "quilembay") y arbustivo-graminosas medias (con Prosopis denudans "algarrobillo patagonico" y Lycium spp. "yaoyin") siendo la gramínea más común Stipa humilis "coiron llama". Los mallines son escasos y salinos. En el fondo de los grandes bajos se desarrollan estepas arbustivas halófitas de Atriplex lampa "zampa". En los ambientes más húmedos se desarrollan cortaderales. Predominan los suelos areno-arcillosos, pobres y con un fuerte déficit hídrico (Aridisoles y Entisoles). La principal actividad es la ganadería ovina y caprina.









Corte longitudinal del suelo






-diferencias entre suelo de zonas áridas y suelo de zonas con abundantes precipitaciones




Con estas dos imágenes podemos apreciar una clara diferencia entre los suelos que se encuentran en las zonas de clima árido y los suelos que se encuentran en zonas de climas que tienen abundantes precipitaciones. Es válido aclarar que la estepa patagonica estaría representado por la imagen de la izquierda, los suelos de zonas áridas.
En estos suelos, las escasas precipitaciones impiden que las sustancias orgánicas , el calcio, el magnesio, el potasio y el sodio desciendan hacia los horizontes inferiores, haciendo que se queden en el horizonte A. En cambio, en los suelos de zonas con precipitaciones estas mismas sustancias, se disuelven con el agua de lluvia, y son arrastrasados hacia el horizonte C. Además en este tipo de suelos, las vegetaciones son abudantes mientras que en los de zonas áridas son escasas.